De esta manera se les hace saber que a este bolg se le ha dado fin ya que únicamente fue un ejercicio.
Gracias!
Rafael Wences
Edgar Espinoza
Divulgación científica
jueves, 25 de noviembre de 2010
viernes, 12 de noviembre de 2010
Primera Fábrica de órganos bioartificiales en Madrid
Ante la falta de los órganos necesarios para la cantidad de personas necesitan un transplante, la medicina ha tirado por el camino del medio: que no hay donantes, pues fabriquemos los órganos. Así ha nacido en Madrid un centro pionero en el mundo: el primer laboratorio de fabricación de órganos humanos bioartificiales.
Pero ¿cómo consiguen fabricar tejidos y órganos humanos óptimos para el transplante?. El proceso se basa en tomar órganos que no sirvan para ser implantados en un paciente por no estar en perfecto estado y vaciarlos. Gracias a una descelularización mediante detergentes y productos de lavado queda únicamente el andamiaje formado por colágeno y fibrina. Sobre esta malla de material más duro se implantan células madre del paciente receptor, de modo que la estructura previamente vaciada sirve como guía para la formación del órgano. Una vez inyectadas las células madre, se produce el desarrollo de las mismas, especializándose en el tejido del propio órgano (pulmonar, cardiaco, etc.).
De este modo se evitaría el principal problema a la hora de realizar un transplante: el rechazo. Como son las propias células madre del paciente receptor las que desarrollan el órgano, el cuerpo humano no lo detecta como un ente extraño de modo que no actúa para expulsarlo y no se produce el problemático rechazo que tantos problemas médicos acarrea.
Como explicaron varios médicos del equipo durante la presentación, con el doctor Fernández-Avilés a la cabeza, "este año conseguiremos un parche de tejido cardiaco que lata" apuntando además que "en cinco o diez años" se podrán implantar partes de un corazón, aunque todavía colocar uno entero "es un horizonte más lejano".
El laboratorio, que está ubicado en el hospital Gregorio Marañón de Madrid y ha sido presentado esta misma semana, pertenece al proyecto SABIO (Matrices y Órganos Bioatrificiales para Transplantes, por sus siglas en inglés).
Rafael David Wences Hernandez
viernes, 5 de noviembre de 2010
¿Enfriamiento solar?
La disminución de la actividad solar podría contribuir al calentamiento de la Tierra en lugar de provocar su enfriamiento como se pensaba hasta ahora, según un estudio que se ha publicado en la revista “Nature”. Esta investigación sobre los efectos del Sol en la temperatura de la Tierra que ha llevado a un equipo de expertos del imperial College de Londres y de la Universidad de Colorado en Estados Unidos ha arrojado resultados verdaderamente imprevistos.
En el estudio se señala que la actividad solar se desarrolla en ciclos de once años y que cuando decrece, la radiación que llega a la Tierra también es menor. Esto lleva a pensar a los investigadores que se produciría entonces una baja de temperatura en el planeta.
El quipe de investigadores se centró en la actividad solar producida entre los años del 2004 y 2007, que fue un periodo de actividad solar decreciente, y midieron la energía del sol en longitudes de onda diferentes. Tras haber analizado los datos, vieron que durante ese periodo estudiado, la actividad solar disminuyó pero que ese hecho no provocó, como ellos habían anticipado, un enfriamiento del planeta.
Por lo contrario los científicos observaron que el sol pudo haber ocasionado que la Tierra se calentara todavía más. En base a estos hallazgos, este equipo considero igualmente la posibilidad de que se pudiera generar una situación inversa en cual los periodos en los que la actividad solar es mayor, el planeta se enfríe en lugar de calentarse.
Según la autora principal de este estudio, Joanna Haigh, esta conclusiones suponen un desafío a lo que la comunidad científica sostenía hasta ahora con relación al efecto solar en las temperaturas. Esta experta en física atmosférica reconoce, no obstante, que la investigación se centra en un periodo corto de tiempo, por lo que habría que ampliar el estudio antes de llegar a una conclusión definitiva.
[Edgar Espinoza P.]
miércoles, 27 de octubre de 2010
EL amor influye en el Intelecto
Un reciente meta-análisis realizado por la investigadora Stephanie Ortigue, de la Universidad de Syracuse, en Nueva York, revela que enamorarse no sólo puede provocar una sensación de euforia parecida a la vinculada al consumo de cocaína, sino que también afecta a las áreas intelectuales del cerebro. Además ha calculado que el fenómeno popularmente conocido como 'flechazo' tarda aproximadamente un quinto de segundo en surtir efecto.
Los resultados del trabajo de Ortigue, publicados bajo el título “La Neuroimagen del Amor” en la revista Journal of Sexual Medicine, revelan que, cuando una persona se enamora, hasta 12 áreas del cerebro trabajan conjuntamente para liberar las sustancias químicas que inducen euforia, como la dopamina, la oxitocina, la vasopresina o la adrenalina. Y que “diferentes tipos de amor implican a distintas áreas cerebrales”. Por ejemplo, el amor apasionado pone en acción a las zonas relacionadas con la recompensa y algunas funciones cognitivas superiores, como las que participan en la creación de metáforas y en la representación de la imagen corporal.
Entonces, ¿el amor es corazón o cerebro? “Yo diría que el cerebro, pero el corazón también está implicado", responde Origue, que cita como ejemplo que cuando se generan cascadas de neurotransmisores en ciertas zonas del cerebro el corazón se acelera y aparecen las “mariposas” en el estómago. Según la investigadora entender cómo y por qué nos enamoramos ayudará también a reparar un “corazón roto” por el desamor.
Los resultados del trabajo de Ortigue, publicados bajo el título “La Neuroimagen del Amor” en la revista Journal of Sexual Medicine, revelan que, cuando una persona se enamora, hasta 12 áreas del cerebro trabajan conjuntamente para liberar las sustancias químicas que inducen euforia, como la dopamina, la oxitocina, la vasopresina o la adrenalina. Y que “diferentes tipos de amor implican a distintas áreas cerebrales”. Por ejemplo, el amor apasionado pone en acción a las zonas relacionadas con la recompensa y algunas funciones cognitivas superiores, como las que participan en la creación de metáforas y en la representación de la imagen corporal.
Entonces, ¿el amor es corazón o cerebro? “Yo diría que el cerebro, pero el corazón también está implicado", responde Origue, que cita como ejemplo que cuando se generan cascadas de neurotransmisores en ciertas zonas del cerebro el corazón se acelera y aparecen las “mariposas” en el estómago. Según la investigadora entender cómo y por qué nos enamoramos ayudará también a reparar un “corazón roto” por el desamor.
De acuerdo a recientes estudios médicos los pensamientos positivos afectan saludablemente al cuerpo y a la mente. En este descubrimiento, podemos concluir que el amor, el cual implica felicidad, nos ayuda a desarrollarnos como seres humanos intelectuales. Por otro lado el amor generalmente deja el raciocinio a la deriva. Podremos llegar a ser intelectuales pero quizás no razonantes.
Lo que sí es seguro es que funciona como sedante, así que las preocupaciones se harán a un lado.
Rafael David Wences Hernandez
Bibliografía
RevistaMuyinteresante. (2010). Muyinteresante. Retrieved 10 27, 2010, from Muyinteresante: www.muyinteresante.com
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